sábado, 18 de junio de 2011

VIABILIDAD JURIDICA DE LOS PRODUCTOS TRANSGENICOS

¡NO AL MAÍZ TRANSGÉNICO, FUERA MONSANTO!

Ante el vacío informativo que genera la autoridad en la materia y, aún peor, la distorsión informativa que emiten los funcionarios de SAGARPA para alentar el establecimiento de estos cultivos experimentales, argumentando mayores rendimientos por hectárea y un mejor control de plagas y malezas, durante dos días nos dimos a la tarea de escuchar y cuestionar a especialistas y a otras organizaciones del país y de Estados Unidos que han dado seguimiento puntual y han evaluado los impactos verdaderos de los transgénicos en la producción, la economía, el medio ambiente y la salud humana.

 Los permisos otorgados para la siembra de maíz transgénico en el sur del país no cumplen con los principios y acuerdos establecidos en los tratados internacionales en materia de biodiversidad.

El gobierno mexicano no sólo no exige e impone el cumplimiento de estos tratados firmados por él, sino que alienta la implantación de transgénicos mediante la otorgación de subsidios que por elemental sentido de justica social, y en aras de la soberanía alimentaria, deberían destinarse a fomentar la investigación nacional a partir de la optimización de nuestras variedades nativas.

El principio de precaución no se cumple porque existe riesgo evidente de contaminación de las variedades y especies tradicionales así como riesgos para la salud de las personas.

 El principio internacional para fomentar el conocimiento informativo previo tampoco se cumple, pues hasta ahora, la SAGARPA se ha negado sistemáticamente a proporcionar información sobre la variación genética que pretenden ensayar, los resultados esperados, y principalmente se niegan a revelar la ubicación exacta de las parcelas a establecer la siembra experimental en Sonora, temiendo seguramente la protesta social en dichas parcelas y, fundamentalmente, la promoción de amparos de los productores vecinos de los agricultores cooperantes.

Que es falso que los transgénicos aumenten la producción, abaten costos y contribuyen a abatir el hambre. Al contrario, mediante las patentes de las semillas modificadas, las trasnacionales como Monsanto se apoderan por completo de los beneficios de la agricultura dando el tiro de gracia a los productores locales.

Es evidente que requerimos en México un marco jurídico que garantice el principio de precaución frente a la presencia de cultivos y alimentos transgénicos, y no una legislación a modo como la que ahora favorece los intereses de las trasnacionales de alimentos como Monsanto, por encima de la salud y economía de los productores y consumidores mexicanos.

Por si lo expuesto fuera poco, de 1996 a la fecha, la trasnacional Monsanto, que detenta el monopolio mundial de las semillas transgénicas, demandó por lo menos a más de 150 agricultores acusándolos de violar sus patentes, creando una cultura de miedo e intimidación entre los productores, quienes incluso sin usar los productos de la multinacional, sufren la contaminación transgénica en sus parcelas, y por ello, en el absurdo legal, son objeto de demandas.

Resolutivos y acuerdos con el gobierno

1. Exigimos la cancelación inmediata de los 35 permisos otorgados para la siembra experimental de maíz transgénico en ocho estados de la república.

2. Demandamos la derogación de la Ley de Bioseguridad de organismos genéticamente modificados y la aprobación de un marco jurídico que garantice el principio de precaución frente a cualquier evento de presencia de cultivos o alimentos transgénicos.

3. Reclamamos la derogación de la Ley de Variedades Vegetales y la Ley de Producción y Certificación de Semillas, porque comprometen nuestros derechos comunitarios, sobre los recursos genéticos y las semillas; y sustituirlas por nuevas leyes que fomenten la investigación y desarrollo en semillas, que garanticen la protección de los derechos de los pueblos sobre las semillas y aseguren su libre intercambio evitando la diseminación de semillas estériles, como las que se derivan de la llamada tecnología “zombi” o “terminator”, y frenar así la dependencia tecnológica y económica.

4. Exigimos el cumplimiento cabal de los compromisos internacionales suscritos por nuestro país en la Agenda XXI, en la Cumbre del Tierra, la Convención de Bioseguridad, y particularmente de los principios derivados del Protocolo de Cartagena, referidos a: precaución, el conocimiento informado previo, el reparto equitativo de beneficios, y los derechos de los pueblos indios sobre sus recursos naturales y el conocimiento asociado a ellos.

5. Solicitamos al Congreso de la Unión el reconocimiento y aprobación del derecho a la alimentación, como derecho constitucional universal. ¡Por una alimentación sana y suficiente para todos los mexicanos!

6. Exigimos que todos los alimentos transgénicos que se producen en México o se importan, sean debidamente etiquetados para garantizar el derecho elemental de libre determinación como mexicanos a decidir lo que comemos.

7. Exigimos políticas públicas adecuadas para atender la creciente pobreza alimentaria en nuestro país y la alarmante dependencia alimentaria que representa casi la mitad de lo que consumimos. En consecuencia, demandamos al gobierno acatar los principios de la soberanía alimentaria previstos en la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, fomentando la producción nacional, garantizando alimentos sanos libres de pesticidas, orgánicos y sustentables, y fortaleciendo la agricultura campesina.

8. Convocamos a la sociedad civil, a las organizaciones sociales y a las organizaciones de productores y campesinos, sin distinción de tamaño o afiliación política, a crear una red en defensa del maíz, a construir y operar una red de vigilancia y monitoreo para evitar que este intento de siembra experimental contamine nuestras parcelas y consecuentemente los alimentos.

9. Exigimos al Gobierno que garantice y defienda nuestros derechos como productores de granos básicos y alimentos, que se protejan los recursos naturales y el medio ambiente en nuestra entidad; y que exija a la contraparte federal la información suficiente, el seguimiento y supervisión de los seis permisos autorizados.

10. Exigimos al Gobierno Federal que informe que tipo de experimentos está autorizando, que tipo de transgénico es la semilla autorizada, en que predios están sembrados. Los vecinos tenemos derecho a esta información por la magnitud del riesgo al que nos están exponiendo.



Programa para el Campo Mexicano

1) Que el campo y los campesinos e indígenas y los pobres de las ciudades sean una de las prioridades del desarrollo nacional, reflejada en un presupuesto justo, el cual garantice la producción de alimentos sanos y accesibles para todos los mexicanos.
2) Impulsar una reforma rural integral y sustentable, que signifique aplicar una agricultura multifuncional, con servicios financieros accesibles y fortaleciendo los mercados locales y regionales en nuestro país.
3) Impulsar una política social rural que erradique la pobreza en el campo, garantice el servicio de salud gratuita, haga efectiva la educación básica de nueve años a los hijos de campesinos, que garantice el aprendizaje de la lengua natural de cada región y se creen y fortalezcan fondos sociales para que los pobres generen autoempleo.
4) Hacer una reforma jurídica rural, para elevar a rango constitucional la Soberanía Alimentaria, que impulse la plena aplicación de la Ley de Desarrollo Rural Sustentable la cual garantiza la Soberanía Alimentaria para los mexicanos; que se renegocie el TLCAN en materia agropecuaria; y que se suprima del Articulo 27 Constitucional que las sociedades mercantiles sean dueñas de predios rústicos.
5) Reconocer los pueblos indígenas como sujetos de derecho.
6) Definir y aplicar políticas de apoyo a los trabajadores migrantes.
7) Impulsar una política que garantice la bioseguridad alimentaria y la protección de la biodiversidad.
8) Fomentar la organización campesina indígena, con especial énfasis la de las mujeres y los jóvenes.
9) Lograr mayores captaciones fiscales con justicia y equidad para los campesinos e indígenas y pobres de la ciudad.
10) Que cualquier reforma institucional garantice que los instrumentos gubernamentales se pongan al servicio de los campesinos e indígenas y que no se usen en forma coercitiva y patrimonialista.
¡¡¡SOBERANÍA ALIMENTARIA, DEMOCRACIA Y JUSTICIA PARA UNA VIDA DIGNA!!!

EQUIPO:
-          KATIA CHAVEZ MEJIA
-          ANDREA GONZALEZ HERNANDEZ
-          EDGAR ROQUE ESTRADA
-          ELSA GUADALUPE SOLANO GARCIA
-      JAZMIN ARACELI VALDEZ URBINA

Nallely Granados Benitez Idania Jasso Izquierdo Mariana Benitez Guadarrama Lorena Piña Gallegos Javier Reyes Cejudo


En los últimos meses se ha desatado una fuerte polémica en México sobre un tema que a todos los ciudadanos del país nos concierne. Se trata de la aprobación o no de la ley de bioseguridad de organismos genéticamente modificados (OGM).
maiz campoSin embargo yo me pregunto: de los casi cien millones de habitantes que somos ¿cuántos sabemos a qué se refiere esta ley y cuáles son sus implicaciones? ¿cuántos conocemos el significado de la palabra transgénico u organismo genéticamente modificado?
Aunque no he hecho un sondeo exhaustivo, me parece que es poco el porcentaje de gente que tiene respuesta a estas preguntas.
Es por ello que en esta ocasión dedicaré este espacio a dar información para que quien lo lea pueda tener una postura frente al tema o al menos, si esto es muy ambicioso, comencemos a interesarnos y sepamos dónde investigar.
Dentro de las ciencias naturales existen diversas disciplinas en las que científicos de todo el mundo continuamente generan conocimiento. Concretamente existe un campo que ha tenido gran auge en las últimas décadas: la genética y su correspondiente aplicación en la biotecnología. Este campo ha escudriñado las células de plantas y animales para conocer cómo funcionan y cuáles son los mecanismos que regulan sus ciclos de vida, pero ¿qué hay en las células que las hace tan atractivas? Ellas contienen la información indispensable para que los organismos puedan cumplir con su función en la naturaleza. Esta información esta condensada en lo que conocemos como genes y es heredada de padres y madres a hijos de generación en generación.
Es así como la genética en conjunto con otras disciplinas, ha emprendido numerosas investigaciones para conocer de qué están hechos los genes, cómo transmiten su información y cómo se expresa en cada individuo ya sea planta o animal. Existen grandes proyectos como el de genoma humano y otros que buscan descifrar los códigos genéticos de diferentes especies para conocer el origen de enfermedades, mecanismos de defensa y de sobrevivencia, entre muchas otras cosas. Tal es el caso de las plantas que se cultivan para alimento como maíz, jitomate, soya, arroz y papa o para la industria como el algodón.
Una vez que se conocen los genes y se sabe para qué sirven entonces se comienzan a hacer experimentos para ver qué sucede si cambiamos un gen o incluso le ponemos uno de otra especie. Y es así como surgen los organismos genéticamente modificados y más concretamente, estos últimos conocidos como transgénicos. De estos se han creado varios a nivel mundial sin embargo, existe una fuerte polémica sobre su uso debido a razones principalmente ecológicas, de salud y económicas. Para entender mejor esto analicemos rápidamente un caso concreto: el maíz Bt.
México es conocido a nivel mundial por ser el centro de origen y diversificación del maíz. Para nosotros este grano es parte fundamental no solo de la dieta sino de nuestra cultura. Se siembra en casi todo el territorio nacional y existen más de treinta razas cada una relacionada con diferentes prácticas, tipos de clima, suelo y cultivos como el frijol, la calabaza, el amaranto y la chía además claro, de las múltiples formas de comerlo y prepararlo. Sin embargo este grano al igual que cualquier planta, es susceptible de ser "atacado" por insectos como el gusano cogollero.
Para proteger al maíz de este depredador desde hace varias décadas se han utilizado sustancias químicas que matan al insecto. Sin embargo recientemente con los avances de la genética se creó un nuevo maíz conocido como maíz Bt.
En el laboratorio se le puso un gen de una bacteria llamada Bacilus thuringiensis (Bt) que produce una sustancia tóxica para la larva del gusano, haciendo que este se muera cuando se alimenta del maíz. Y es así como tenemos ahora el maíz transgénico Bt, que contiene un gen de otra especie -en este caso una bacteria- y que al reproducirse lo transmite a las siguientes generaciones.
En el mundo se siembran ya miles de hectáreas con esta semilla y en México entra a través del maíz que le compramos a Estados Unidos, siendo distribuido ya para alimento de ganado y de seres humanos.
A simple vista parecería que es mejor tener un cultivo al cual no se le tienen que poner sustancias químicas, sin embargo el problema no es tan sencillo. Lo que tenemos en frente es un nuevo organismo creado en laboratorios y no por la naturaleza.
Esto significa que no sabemos cuáles serán las respuestas de otros seres vivos a esta nueva especie y por lo tanto las implicaciones ecológicas que tendrá. Tampoco sabemos qué puede pasarnos -a mediano y largo plazo- a quienes nos alimentemos de ellos. Y de lo que si estamos seguros es que perderemos nuestras semillas criollas y paralelamente continuarán enriqueciéndose los grandes laboratorios y empresas trasnacionales que han patentado estos organismos.
Existe un acuerdo internacional denominado -Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de la Biotecnología- que fue ratificado por México y que sienta las bases para la creación de un marco legal y jurídico. En nuestro país actualmente se discute la ley de bioseguridad de organismos genéticamente modificados que busca regular su acceso, cultivo y uso en general.
No obstante es una propuesta de ley que, a mi modo de ver y de muchos otros mexicanos y mexicanas, infringe el Protocolo de Cartagena, no respeta los derechos de campesinos y consumidores, no protege el medio ambiente y nuestra diversidad genética y pone en peligro nuestra producción agrícola, beneficiando directamente a las empresas trasnacionales y a otros gobiernos como el de Estados Unidos ­algo que existe desde la firma del TLC­.
Es por esto que creo importante que todos conozcamos esta ley y opinemos sobre ella e invito a los legisladores a que hagan un poco de memoria sobre nuestra propia historia y recuerden que la tecnología no siempre nos ha beneficiado; consideren ahora el principio precautorio antes de seguir tomando decisiones.
Esto es un tema que requiere un análisis científico y ético más profundo y no solo de los diputados e investigadores sino de toda la sociedad, porque lo que esta en juego es nuestra soberanía alimentaria, nuestra salud y la del planeta

Una de las primeras tareas del Parlamento español con el regreso al curso en septiembre será el análisis del proyecto de ley aprobado y remitido por el Gobierno en verano sobre la utilización confinada, liberalización voluntaria y comercialización de Organismos Modificados Genéticamente (OMG). En otras palabras, la ley sobre transgénicos, un texto muy esperado y que reúne en torno a sí posturas encontradas respecto a sus beneficios o perjuicios en la alimentación humana y animal. Mientras Estados Unidos ha abierto la mano en los últimos diez años, hasta convertir su agricultura en dependiente de los OMG, en Europa se cerró la "barrera" con una moratoria tras aceptar al maíz y la soja.
El proyecto de ley gubernamental reparte las responsabilidades entre la Administración central (dará las licencias) y las comunidades autónomas (labores de control). Para otorgar una licencia comercial (que nunca podrá exceder de diez años) exigirá todo tipo de estudios técnicos, evaluación de riesgos, planes de seguimiento y etiquetados claros. También marca las tarifas (hasta 12.040 euros por una licencia comercial), y las posibles multas (1,2 millones de euros en casos de infracción muy grave). El plazo de enmiendas políticas finalizó el miércoles. Esta norma y la entrada en vigor de una nueva Directiva europea en octubre "harán posible que se reinicie el proceso de aprobaciones de nuevos productos. Hay trece que están esperando", estimó el director de Biotecnología para el Mediterráneo de la multinacional Monsanto, Miguel León.
Antes de que lo discutan los políticos, el texto sólo ha servido para reabrir el exacerbado debate anterior. "El texto de la Comisión Europea es progresista y riguroso, el español suprime aspectos claves para los controles y llega tarde. Creemos que podría ser ilegal y no descartamos denunciarlo si se aprueba", explicó el responsable de Ingeniería Genética de Greenpeace, Juan Felipe Carrasco. "El nuevo texto proporcionará que las autorizaciones se realicen caso por caso, bajo el control del principio de precaución, disipando miedos injustificados ante un daño que jamás se ha producido", resumió el abogado experto en Derecho Alimentario y transgénicos, Enrique Marín.
Riesgo cero
En medio están los científicos españoles, conscientes de que el nuevo texto puede abrir espacios a sus investigaciones. "La soja transgénica ha pasado por 1.800 analíticas, la biológica por ninguna. Nunca existe riesgo cero en nada. Pero me gustaría que todo se evaluara igual y que el consumidor eligiera", explicó el investigador del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Valencia Daniel Ramón.
En un plazo no muy lejano, este científico estampará su nombre en la patente de la primera naranja transgénica. Y hasta 2010 habrá nuevas patentes en campos como las levaduras, en las que España es una potencia mundial.

El titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Rafael Elvira Quesada, sostuvo que se actuará con fortaleza contra quien produzca maíz transgénico sin autorización, luego de las reformas Reglamento de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados, sobre lo cual sostuvo, no se hicieron bajo presión de empresas privadas.En conferencia de prensa donde amplió el sentido de los referidos cambios a la normatividad en cuestión, que dijo se aplicarán con rigor, Elvira Quesada subrayó que contrario a que esas modificaciones fomenten el cultivo indiscriminado de maíz transgénico, ayudarán a que las cosas "no se salgan de control".
Cabe recordar que el viernes pasado se publicó el decreto para las secretarías de Agricultura y de Medio Ambiente que "deberán promover la conservación in situ de razas y variedades de maíces criollos y sus parientes silvestres, a través de programas de subsidio u otros mecanismos de fomento para la conservación de la biodiversidad, sin que implique autorización para el cambio del uso de suelo de forestal a agrícola".
Las autoridades competentes en materia de bioseguridad promoverán el desarrollo de laboratorios para la detección, identificación y cuantificación de maíz genéticamente modificado.
Se señala que el maíz transgénico liberado tendrá que tener características que permitan el uso y consumo humano o animal, así como su uso en procesamiento de alimentos.
Sobre el particular, Elvira Quesada dijo que para el programa de protección al maíz criollo, se tienen contabilizados 84 proyectos de conservación criollo, así como 14 estudios de apoyo y capacitación para explicar a la gente lo que se debe hacer.
Precisó que para ello se tiene una derrama hasta ahora de 6.2 millones de pesos y el programa prevé un presupuesto de 60 millones de pesos.
Para ese programa, continuó, hay 16 áreas naturales protegidas en un proyecto inicial, en los estados de Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Tamaulipas, San Luis Potosí, Coahuila, Durango, Chihuahua, Colima, Jalisco, Guanajuato, estado de México y Pueblo.
Esto, puntualizó, es un llamado a todos los campesinos que se establecieron antes de que se decretara un área natural protegida y que han venido sembrando el maíz criollo cada año, para que tengan la posibilidad de un apoyo del gobierno federal para la producción donde no haya afectación al área natural protegida.
En total, se tienen considerados 84 proyectos de conservación de maíz criollo y para que por lo menos 10 mil hectáreas en el país sean conservadas en su estado nativo, bajo una regulación específica en zonas de influencia dentro de las áreas naturales protegidas, indicó.
cgb

viernes, 17 de junio de 2011

EQUIPO 7 "PRODUCTOS TRANSGÉNICOS" VIABILIDAD JURÍDICA SEGUNDA PARTE

INTEGRANTES DEL EQUIPO:
BRIAN ULISES ROQUE OCAMPO.
MARIO ALBERTO BALTAZAR ÁLVAREZ.
FRANCISCO JESÚS CORÁNGUES HERNÁNDEZ.
URIEL DÍAZ MACARIO.
ALEJANDRO GARCÍA GARCÍA.

NOCIONES DE DERECHO POSITIVO MEXICANO
VIABILIDAD JURÍDICA SOBRE LOS PRODUCTOS TRANSGENICOS: SEGUNDA PARTE

"Es responsabilidad del Gobierno Federal impulsar la productividad del campo mexicano, pero también es su responsabilidad constatar que las herramientas novedosas que se utilicen para elevar la productividad no afectan negativamente al medio ambiente, la diversidad biológica, la salud humana, o a la sanidad animal, vegetal y acuícola del país, los cuales son bienes tutelados en el marco de la Bioseguridad en México", podemos leer en el comunicado de la Secretaría de Agricultura.

Los principales motivos para negar este permiso son varios, destacando especialmente el elevado nivel de seguridad que otorga la definición como cultivo experimental , siguiendo con lo establecido en la Ley de bioseguridad de organismos genéticamente modificados (LBOGM), que el Congreso Mexicano aprobó, que avala la creación, desarrollo y comercialización de productos transgénicos, aunque establece un régimen de protección especial para el maíz nacional.
 Principalmente la LEY DE BIOSEGURIDAD DE ORGANISMOS GENÉTICAMENTE MODIFICADOS se encargada de todas las exportaciones que se hacen en México sobre la producción de transgénicos, por lo que está a favor, solamente que esta revisa que vallan en buenas condiciones.

El Protocolo de Cartagena estableció medidas de bioseguridad para los Organismos Genéticamente Modificados (OGM), entre éstas la obligación de que en las importaciones o exportaciones de granos para la alimentación animal o humana se incluya una leyenda que advierta que pueden contener productos transgénicos.
También autoriza la importación de transgénicos destinados al consumo humano o al procesamiento de consumo humano, al igual que los empleados en la salud pública o la biorremediación (cuando hay plagas o contaminantes que ponen en peligro a especies animales, vegetales o acuícolas). Cabe destacar que nuestro país, México es una región muy rica en gran diversidad de especies de maíz y que puede haber muchos daños en  organismos y seres vivos si se produce en exceso ese maíz, por eso el Protocolo de Cartagena impuso una limitación para evitar una degeneración, no sólo en el maíz, sino en muchas especies de origen mexicano, lo cual permitirá un régimen de protección, lo único es que aun no se sabe cuál será ese régimen de protección. En algunas fuentes decía que como los transgénicos se aprobaron en México en el año de 2004, el régimen del Protocolo proponía que a el maíz y sus diversas especies se les proporcionara un etiquetado que permitiera a la sociedad conocer si ese producto contenía algunos transgénicos.
 Por otra parte la Red en Defensa del Maíz denunció también que leyes estatales que dicen "proteger el maíz criollo", como las aprobadas en Tlaxcala y Michoacán, no prohíben el maíz transgénico ni previenen la contaminación con éste, como algunas ONG y políticos han querido hacer creer para sacar partido en sus campañas. Más al norte del país, exactamente en Tamaulipas, donde se apoyo a la multinacional Monsanto, el gobierno aprobó por primera vez la siembra de maíz transgénico en fase “piloto”, algunos piensan que esto es muy prudente, pero en realidad  puede verse de otra manera porque así es una forma de ir apoderándose poco a poco de regiones en el país y en el mundo y las empresas multinacionales aprovechar al máximo esas porciones de terreno.


CONCLUSIONES
Para nosotros como equipo nos parece que en cuanto a los productos transgénicos, las leyes que se han hecho en México son de vital importancia porque realizan las limitaciones necesarias que debe haber en toda nación, pues si estos productos de comercializan en exceso pueden provocar muchos efectos, tanto en los organismos vivos que los consumen, como en nuestro entorno, es decir, en la tierra donde son cultivados.
Está bien que las personas encargadas de crear las leyes y normas tengan una visión activa de los transgénicos y se preocupen un poco por lo que se hace con esos productos dentro de la nación mexicana, aunque creemos que siguen faltando más leyes, o bien, que se den más a conocer porque muchas personas no saben mucho sobre el tema y en un futuro será de gran importancia el tener el conocimiento de las ventajas y desventajas de los organismos genéticamente modificados y que además cuáles son las formas de obtener y comercializar esos productos que van en contra de las autoridades de la nación.
Lo malo es que los transgénicos no están siendo utilizados para lo que realmente fueron creados, sino que las multinacionales solo se aprovechan y se siguen expandiendo en todo el mundo, enriqueciéndose más y más pero dejando a los países en desarrollo con más pobreza.



FUENTES DE INFORMACIÓN:

VIABILIDAD JURIDICA DE LOS ALIMENTOS TRANSGENICOS

INTEGRANTES:
MA. CONCEPCION ESPINO FAJARDO
JESSICA GUADARRAMA HERNANDEZ
ANGELICA MALVAEZ RAMIREZ
LUZ ITZEL REYES GARCIA
ELDA VELAZQUEZ ALCUDIA
JUAN DIEGO SANCHEZ PEÑALOZA

 NOCIONES DE DERECHO MEXICANO

Artículo 1. La presente ley es de observancia general en toda la República Mexicana, y tiene por objeto, la regulación y supervisión del consumo, producción, distribución y comercialización de los productos transgénicos.
Artículo 2.- Para lograr los objetivos que se proponen en esta ley se contará con el apoyo de las siguientes secretarías:
a).- Secretaría de Salud, poniendo en práctica las medidas tendientes a conservar la salud y la vida.
b).- La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, para la conservación de los suelos agrícolas, pastizales y bosques.
c).- La Secretaría del Medio Ambiente Recursos Naturales y Pesca, para fomentar la protección, conservación de los recursos naturales y bienes y servicios ambientales, vigilando y estimulando en coordinación con las autoridades federales, estatales y municipales el cabal cumplimento de las leyes.
Artículo 3.- El Gobierno de la República a través de la Secretaría de Agricultura, de Salud y Medio Ambiente, establecerá los programas, planes y estrategias de acción, para el control, la investigación y en su caso el desarrollo de productos transgénicos.
Artículo 4. Todos los alimentos procesados y no procesados deberán contar con los respectivos permisos para su comercialización, emitidos por parte de las secretarías de Agricultura, de Salud y Medio Ambiente, así como, una etiqueta de origen, en donde se especifique si son o no, productos intervenidos genéticamente es decir transgénicos, así como, su composición y procedencia.
Artículo 5.- El Gobierno de la República deberá considerar la educación, el intercambio de información, la investigación científica la transferencia de tecnología, la utilización, el manejo y el desarrollo de los productos transgénicos, como un tema de seguridad nacional.
Hace 2 años que México aprobó la Ley de Bioseguridad y Organismos Genéticamente Modificados, pero faltaba el reglamento para que entrara en vigor.
El titular de la Secretaria de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Alberto Cárdenas Jiménez, informó que con esta nueva regulación México entra de lleno a la biotecnología.
En él se especificará donde,  cuando,  por qué y se dará toda la certidumbre para controlar un asunto que ya está aquí, como es el uso de la biotecnología en todas las actividades agropecuarias y pesqueras. El titular de la SAGARPA aseguró que con el uso regulado de la biotecnología se van a abrir grandes oportunidades de desarrollo para México.
De acuerdo con Cárdenas Jiménez, con la publicación del reglamento empresas europeas, norteamericanas y asiáticas podrían incrementar su presencia en México y desarrollar proyectos de inversión. Añadió que mediante este reglamento se podrá ordenar todos los alimentos transgénicos, especialmente los que son para la siembra del maíz que ha sido la más demandada.

.
. Desde 2004, existe legislación que regula el etiquetado y trazabilidad de alimentos y piensos modificados genéticamente.

En virtud de estas normas, deben ser etiquetados los productos que deriven de cosechas transgénicas, independientemente de la presencia de ADN o de proteína "transgénica" en el producto final. En la etiqueta debe constar la indicación
«Este producto contiene organismos modificados genéticamente», o bien «Este producto contiene [nombre del o de los organismos] modificado genéticamente».

Esto incluye a ingredientes, materias primas y aditivas.
las etiquetas deberían decir cómo han sido obtenidos los productos y qué características especiales incorporan frente a los convencionales. De lo contrario se estaría violando con el artículo 4 de la Ley 24.240 de Defensa del Consumidor que dice: quienes produzcan, importen, distribuyan o comercialicen cosas o presten servicios, deben suministrar a los consumidores o usuarios, en forma cierta y objetiva, información veraz, detallada, eficaz y suficiente sobre las características esenciales de los mismos.  Por otro lado, el artículo 42 de la Constitución Nacional, norma suprema, se vería vulnerado también ya que éste establece que los consumidores y usuarios de bienes y servicios, en la relación de consumo, tienen derecho a la protección de su salud, seguridad..., a una información adecuada y veraz; a la libertad de elección. En nuestro país,  no es obligatorio el etiquetado indicando si el alimento ha sido genéticamente modificado. En mi opinión, no se debería adquirir nunca productos sin ningún tipo de etiquetado. Además, debemos enterarnos de si los productos han provocado algún tipo de rechazo hacia el gen extraño.

 CONCLUCIONES:
 Los productos transgénicos se han producido desde hace mucho tiempo en nuestro país por lo cual se vio necesario establecer leyes que exijan un buen producto para evitar daños en la salud.
Estas leyes u obligaciones exigen un etiquetado en los alimentos. Nosotros pensamos que es muy importante para saber si lo que consumimos es un alimento o no, se han dado casos de alergias como ya hemos investigado y por eso es muy necesario exigir q los productos que llegan a México cumplan con todas las normas ya establecidas y que nosotros siempre leamos lo que contiene para evitar problemas de salud.
Nosotros consideramos que lo mas sano y recomendable es que se sigan con los cultivos que hacían antes, que se les diera prioridad a los agricultores, campesinos para que nos proporcionen buenos productos pero como hemos ya comentado es ahora muy difícil ya que usan fertilizantes por que el clima no es a veces favorable.
Gracias a estas investigaciones que todo el grupo hemos realizado podemos informar a la gente de lo que son los alimentos transgénicos para que asi puedan hacer valer sus derechos sobre una buena salud y en adquirir productos de calidad.

Viablidad Juridica De Los Transgenicos

EQUIPO:

Gabriel Solorzano Rodriguez
Dafnis Gonzales Vargas
Ariana De La Luz Osorio
Oscar Erick Sanchez Cid
Cristian Arturo Negron Garcia

Materia: Nociones Del Derecho

Los puntos que mencionamos es lo más reciente que existe actualmente en la red de los transgénicos según nuestra investigación, ya que no tiene caso volver a repetir la información de la investigación pasada.
·         Bajo el oculto nombre de “Derechos de Obtentores Vegetales” El Senado aprobó el proyecto de ley (boletín Nº6355-01) que no es nada menos que la autorización por parte del estado de que la empresa Monsanto introduzca masivamente tanto sus semillas transgénicas como sus pesticidas. Además de darle propiedad intelectual a todas las especies vegetales que podrán ser registradas por las compañías transnacionales. Y por si fuera poco, a los campesinos se les prohibirá seguir utilizando semillas comunes y corriente y tendrán que pagar para utilizar las semillas transgénicas.
·         El proyecto de Ley de la Revolución Productiva no incorpora el tema de productos transgénicos, sino que propone un modelo de producción agroalimentaria que garantiza el adecuado y sano acceso a los alimentos, afirmó la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales.
Legislativo analiza un proyecto de Ley de revolución productiva que garantiza la soberanía alimentaria (ABI). Durante su intervención en la sesión plenaria de la Cámara de Diputados la noche del lunes, la Ministra hizo una amplia explicación del proyecto de Ley.
Dijo que el objetivo de la Ley "no es incorporar el tema de transgénicos, sino el productivo, un modelo de producción agroalimentaria que garantice el adecuado y sano acceso a estos productos por parte de la población".  Agregó que, en forma paralela, se busca mejorar las condiciones de vida de los productores.
 El proyecto de Ley consta de 56 artículos y disposiciones transitorias, finales, adicionales, abrogatorias y derogatorias.
 Morales aseveró que este proyecto prohíbe la introducción de paquetes tecnológicos agrícolas que involucren semillas genéticamente modificadas, puesto que Bolivia es un centro de origen de productos naturales.
 Agregó que la Ley propone la creación de las Empresas de Semillas y de fertilizantes  con el objetivo de fortalecer las semillas naturales y evitar la importación de fertilizantes.
 La Ministra sostuvo que el proyecto propone la aplicación de bandas de precios en los alimentos estratégicos que garanticen el precio justo al pequeño productor como al consumidor. Hizo hincapié en la organización de pequeños productores agrícolas y pecuarios, en el marco del desarrollo de la economía comunitaria y plural.
·           "Lo más importante es que esta ley es la piedra angular en la construcción del nuevo Estado en su dimensión económica, porque la Constitución Política establece que la economía boliviana es plural, conformada por una economía privada, una economía pública y además por una economía comunitaria y por cooperativas", señaló.
    Destacó igualmente que este proyecto de Ley fue elaborado con la participación de las organizaciones de productores, mujeres campesinas, productores de comunidades campesinas, interculturales y otros sectores involucrados.
    A su vez, el presidente de la Cámara de Diputados, Héctor Arce, sostuvo que el proyecto es de vital importancia para la actual coyuntura que vive el país para satisfacer las necesidades alimentarias de la población y también hacer frente a los cambios climáticos para garantizar la soberanía y seguridad alimentaria.
·         La ley: se ruega moratoria
El proyecto que hoy se discute en el Senado (y que ya fue aprobado por la Cámara de Diputados) revive a otro que en 2009 ya planteaba ideas similares. Para el vocero de Chile Sin Transgénicos, “al leer la discusión del parlamento se nota la desinformación. Hay una negación total de todos los daños que provocan los transgénicos”.
En palabras de Sauvageot, lo que pretenden quienes solicitan que la ley no llegue a su aprobación es “que por la vía de la información de los senadores y diputados a cargo de tramitar este proyecto, sepan que en otros países se ha logrado lo que se llama la ‘moratoria de los eventos transgénicos’, es decir, detener nuevas autorizaciones, leyes o regulaciones que permitan que esto siga avanzando hasta no tener certeza científica real de la inocuidad de este tipo de alimentos, cosa que la industria jamás ha demostrado”, recalca.
Lo anterior, agrega, “se basa en un principio de derecho internacional llamado ‘principio precautorio’ que establece que no se deben aprobar proyectos cuando no existe certeza absoluta de la inocuidad de lo que se está aprobando. Hoy eso no existe, por lo tanto mientras no esté zanjada esa discusión, debería establecerse una moratoria y no aprobarse el proyecto”, manifiesta.
La congresista Rosario Sasieta denunció que Alexander Grobman, actual asesor ad honorem del Ministerio de Agricultura en el caso de los transgénicos, es el presidente director de la empresa Semillas Penta del Perú S.A. Un doble cargo que le brindaría muchos beneficios.
Resulta que Semillas Penta del Perú S.A., según consta en su objeto social, se dedica a la “investigación agropecuaria y la producción y venta de semillas y materiales de propagación de todo tipo de plantas procedentes de trabajo de investigación genética“. Es decir a la venta y producción de transgénicos.
De esta forma, el señor Grobman está regulando una ley que le permitirá vender los productos que su empresa produce.
·         El ministro de Economía, Ismael Benavides, no ha cuestionado este hecho. Es más, sigue impulsando el Decreto Supremo 003-2011 – AG, norma que permite la comercialización de los transgénicos, bajo el razonamiento que dentro de 50 años el Perú necesitará alimentarse más (con alimentos transgénicos) porque el país experimentará una sobrepoblación.
Por su parte, el destacado chef Gastón Acurio pidió defender la biodiversidad peruana, la cual podría ser amenazada por el ingreso de transgénicos.


CONCLUSION

Aunque en México ya existen este tipo de leyes sobre los productos transgénicos de la forma en que se deben de tratar, en su consumo y en su producción hacia la ciudadanía y hacia las personas que se dedican a su producción, debemos de reforzar la información con más aclaración de dudas para que la sociedad deje a un lado la ignorancia que existe del tema, y de que se percaten de que existe una diversidad de opiniones y diferentes formas de ver, que externa una forma de pensar y hacer valer lo que piensen sobre los productos transgénicos, ya sea en pro o en contra de cómo cada quien lo considere de que sea bueno o malo para ellos.
También sabemos que dentro de la población existe una infinidad de personas que no exigen la información adecuada para tener un mejor conocimiento porque son ajenos al tema o ni están enterados de su existencia o simplemente no les interesa, que solo consumen el producto porque sale en televisión, agregando que nos damos cuenta la influencia de la mercadotecnia en este tema, y esto nos hace caer en el consumismo, pero cuando nos damos cuenta que estos productos repercuten en la salud es cuando queremos actuar y exigir, en ese momento es cuando ya no podemos hacer mucho ya que las leyes ya están establecidas y muchas veces no las vamos a tener siempre e nuestro favor, por eso es que debemos actuar ahora que seguimos a tiempo de cambiar el resultado.

Por eso todos los ciudadanos tenemos el derecho y debemos hacerlo valer como corresponde para que se nos den la información necesaria y sabiendo eso poder participar en el acuerdo de las leyes de los productos transgénicos ya que las decisiones que se tomen nos van a beneficiar a cada uno de nosotros.

Para que con las leyes que estén en existencia sea más fácil el control de esos productos y aunque estén avalados por la sociedad debemos saber consumir y conocer que es lo que consumimos.

Porque si tenemos el conocimiento de lo que pueden ocasionar los productos transgénicos podemos exigir a nuestro gobierno información y que realicen buenas leyes para que nos sirvan tanto para nuestra salud y para los negocios que existen en el país porque gran parte de la sociedad su forma de mantener su economía es la agricultura.

Ahora con la investigación que realizamos a lo largo de este semestre podemos concluir que a nuestro país, México, le hace falta mucha más participación de la población y que además no pierdan de vista que somos una potencia fuerte de la agricultura y es de suma importancia que exista un equilibrio en el manejo de los transgénicos ya que la parte de nuestra economía se basa en el turismo y nos caracterizamos por nuestra gastronomía natural, sin olvidar el aspecto más importante que es la salud para la sociedad y para las generaciones que nos siguen.

FUENTES DE INFORMACION